MAGIA DE LAS 7 LLAMAS SAGRADAS

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Las velas son sustitutos muy prácticos de las piras ardientes de la antigüedad. Las velas son un misterio en sí, y cuando se encienden de forma mágica o religiosa, son un poderoso elemento religioso mágico energético y vibratorio que actúa en el espíritu de quien recibe su irradiación ígnea. 

Las velas tanto consumen energías del prana, como las energizan y sus halos inter-penetran en las siete dimensiones básicas de la vida, enviando hacia ellas sus irradiaciones ígneas.Es esta capacidad que vuelve a la vela elemento mágico por excelencia, y por medio de sus irradiaciones y vibraciones incandescentes es posible todo un intercambio energético con los seres que viven en otras dimensiones y con espíritus estacionados en otras esferas o niveles vibratorios.

El misterio de las ondas ígneas irradiadas por las llamas de las velas es tan magnífico que podemos ver en él la repetición de las ondas electromagnéticas que fluyen por el Universo.

Esas ondas electromagnéticas divinas, forman como una tela o red sustentadora de la creación divina, por medio de la cual se mueve un océano de factores, esencias y energías que alimentan y sustentan esa misma creación divina, estabilizándola y manteniéndola en equilibrio.

Nuestro cuerpo físico o carnal es una obra prima de la creación, pues ninguna célula deja de ser abastecida por la red de venas capilares transportadoras de la linfa o la sangre, estando saturada de nutrientes fundamentales para el equilibrio energético, de igual forma acontece con el aparato respiratorio o circulatorio, que están enviando todo el tiempo oxígeno para la “respiración” celular. Del mismo modo tenemos un cuerpo energético, que necesita ser alimentado continuamente.

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